Todos hablan de la estrepitosa y mundial quiebra de THOMAS COOK; ¿cuantos saben su historia?
Thomas Cook fue el empresario que a mediados del 1800 inició un imperio turístico con un viaje de abstemios.
El primer viaje organizado por Thomas Cook implicaba un recorrido de unos 17 kilómetros y apenas duraba un día.
Pero en aquel trayecto tendría su origen el turismo masivo moderno, así como la agencia de viajes Thomas Cook, con la que cada año unos 19 millones de personas alrededor del mundo organizaban sus vacaciones y que este lunes se declaró en bancarrota.
Cook, un misionero bautista nacido en el condado británico de Derbyshire, no tenía entonces la intención de crear un emporio empresarial ni mucho menos.
El propósito de aquel primer viaje de un día en tren entre las localidades británicas de Leicester y Loughborough era asistir a un congreso del Movimiento de la Templanza, un grupo formado por personas que abogaban por la abstinencia en el consumo de alcohol.
Cook convenció a la empresa de ferrocarriles Midland Counties Railway Company para que habilitara un tren para ese recorrido y se encargó de promover la asistencia, al punto que -según se cree- esta fue la primera excursión publicitada en la historia británica.
Unas 500 personas decidieron hacer el viaje aquel 5 de julio de 1841. Todo un éxito.
A partir de entonces, Cook empezaría a organizar traslados hacia otras ciudades como Nottingham, Derby y Birmingham para reuniones del Movimiento de la Templanza, así como para actividades de la escuela dominical.
Fue en el curso de estas excursiones cuando se le ocurrió la idea de crear una agencia de viajes.
De ebanista a agente de viajes
Nacido en 1808 en el seno de una estricta familia de cristianos bautistas, Cook abandonó la escuela a los 10 años de edad, cuando comenzó a trabajar como ayudante de jardinería.
Cuatro años después, de la mano de un tío, se convirtió en aprendiz de ebanista, un oficio en el cual trabajaría durante varios años.
A los 18 años de edad se hizo misionero y se dedicó a viajar por los pueblos evangelizando y ganando algún dinero extra con la carpintería.
En 1833, se sumó al Movimiento de la Templanza donde, a la postre, encontraría motivo para organizar sus viajes iniciales.
Cook consideraba el consumo de bebidas alcohólicas como una de las causas de los males que aquejaban a la Inglaterra victoriana y quería ofrecer los viajes como una forma sana de recreación para las personas.
Finalmente, su primera excursión comercial fue un viaje a Liverpool en 1845.
La internacionalización tardaría una década más en llegar.
Luego de organizar numerosos viajes por las islas británicas, Cook se animó a cruzar el Canal de la Mancha en 1855 para ofrecer un tour para acudir a la Exhibición Internacional que se realizaba en París.
El gran éxito obtenido le permitió ir agregando nuevos destinos posteriormente: Italia, Suiza, Egipto y Estados Unidos.
Para 1860, Cook dejó de trabajar personalmente como guía y se dedicó a la gestión de la empresa.
Cinco años más tarde, abrió su primera oficina en Fleet Street, una importante calle comercial de Londres, y en 1872 comenzó a ofrecer viajes alrededor del mundo.
Trenes y mujeres
Muchos atribuyen parte del éxito inicial de Cook a que supo aprovechar las oportunidades que ofrecía la recién creada red de ferrocarriles de Reino Unido.
Para la época, sin embargo, viajar en tren no era exactamente una experiencia del todo cómoda, pues los vagones carecían de muchas comodidades importantes incluyendo calefacción o una adecuada iluminación.
Aunque en primera clase los vagones eran relativamente lujosos, con asientos acolchados y limitados a seis puestos por compartimiento, en tercera clase los pasajeros debían conformarse con unos bancos duros de madera y poco más.
Otro elemento que ayudó al éxito de su emprendimiento fue el hecho de que, por tratarse de viajes en grupo, se creaba la oportunidad de que más mujeres viajaran solas sin tener que enfrentar ningún tipo de reproche social.
«Ese fue un factor en el éxito inicial de los tours de Cook: las mujeres solteras podían viajar como parte de un grupo, sin ningún temor por su seguridad o por daños a su reputación. Era, al mismo tiempo, práctico y adecuado. Los días de las chaperonas y de las restricciones se habían acabado«, escribió Diccon Bewes, autor del libro «Lento tren a Suiza», sobre el primer tour que Cook organizó hacia ese país.
El escritor destaca que en ese primer viaje, de unas 150 personas, había 4 mujeres por cada 3 hombres.
Pero Cook también se benefició de su capacidad de innovación. Así, por ejemplo, la empresa creó en 1868 el sistema de cupones de hotel, que permite a los viajeros pagar por su alojamiento y comida sin necesidad de usar efectivo.
Un año después, contrató dos barcos de vapor para realizar su primer tour por el río Nilo.
En 1872, lanzó y encabezó personalmente el primer viaje alrededor del mundo que duró 222 días y con el que recorrió 46.000 kilómetros.
Seis años más tarde, Cook cedió el control de la compañía a su hijo y socio, Thomas Mason Cook.
Aquejado de problemas de visión durante los últimos años de su vida, el pionero del turismo de masas falleció en 1892.
LA QUIEBRA.
Lamentablemente el sueño del visionario y realizador llegó a su fin; impactando negativamente a millares en el mundo de viajes y turismo; dejando varados a más de 600.000 viajeros por el mundo
De hecho, desde el Parlamento Británico han abierto una investigación para determinar la responsabilidad de la Alta Dirección de Thomas Cook en su debacle y sobre las prácticas contables en la empresa.
En la declaración oficial de quiebra se estima quela compañía tiene una deuda de más de 2.134 millones de euros y adeuda a los proveedores, especialmente hoteles, otros 561 millones.